Dada su importancia, a través del seguro de vida puedes blindar económicamente a tus seres queridos y cubriendo las necesidades básicas y así protegerlos aun cuando ya no estés físicamente con ellos, no obstante, el seguro de vida también puede cubrir situaciones en caso de invalidez o enfermedad grave de la persona que representa la única fuente de ingresos de la familia , cuando éste no pueda realizar sus labores habituales, mediante un anticipo solicitado por el contratante, (de una parte o la totalidad del monto asegurado) por el lapso de tiempo de dure la cobertura del contrato o póliza.
Recomendaciones para contratar un Seguro de vida:
Investigar sobre la solidez y confiabilidad de la empresa aseguradora que se desea contratar, no dejándose llevar por propaganda publicitaria, sino por la eficacia y pronta respuesta por parte de la empresa cuando se amerita.
Establezca una relación entre las necesidades de su familia y el monto que usted puede pagar a un seguro, a fin de determinar tanto el costo del seguro como la factibilidad de pago, una de las condiciones indispensables para la empresa contratante.
Renueve su póliza de seguro si ya la posee, más no le dé largas al tiempo después que esta se haya vencido. Así que, tenga en cuenta el período de tiempo de su póliza, para que la fecha de vencimiento no llegue.
Si estás interesado en adquirir una nueva póliza de vida, no canceles la suscripción actual sin antes evaluar las alternativas que cada una te ofrecen, pues recuerda que cambiar de póliza puede ser costoso.
En caso de renovar su póliza, lea nuevamente detenidamente todas cláusulas, para verificar si las mismas se mantienen cada año o realizan algún cambio significativo que pueda afectar sus intereses personales.
Existen dos tipos de seguros primarios: seguros de valor en efectivo y seguros a términos. El seguro por valor en efectivo entran en él varios tipos; vida universal, vida variable y vida entera. Por otra parte, el seguro a término tiene un pago primario bajo los primeros años de póliza, siempre y cuando no cambies ni modifiques nada de lo que allí dentro cubres, es decir, sin aumentar los valores en efectivos, que te serán de utilidad en un futuro. Esto queda a tu elección, dependiendo de las necesidades actuales y las necesidades que tengas a futuro, y el precio que puedas pagar constantemente.